Me gusta mucho la expresión con los pies en el suelo, y más o menos todos y todas sabemos qué significa: ser realista, tener cabeza y sentido común
Como las plantas, nosotros los seres humanos tenemos raíces. Son nuestros pies. Con la diferencia que nuestros pies nos permiten desplazarnos, alzarnos, ser extensivos. Eso significa, que a diferencia de los árboles fuimos diseñados para no ser sedentarios.
Las raíces en las plantas, están fijadas al suelo y mediante ellas, toman agua y minerales. Los minerales que la energía solar y las descargas eléctricas de la atmósfera les brindan. Las raíces sirven a su vez de almacén de esos alimentos, y como el resto de la planta, van en crecimiento en conjunto con la misma.
Las raíces son de vital importancia, por tal razón, los agricultores es lo primero que deben de cuidar, para que la raíz tenga una formación sana, sin ganchos nudos, con una radicular extensa para que se profundice, laterales fuertes y abundantes pelos absorbentes.
En otro escrito hablaremos con detalle de las raíces al cultivar las plantas medicinales.
Por el momento hablemos de nuestras raíces: los pies y la importancia para nuestra salud, como aliados fundamentales.
Cada paso que damos, implica una compleja red de huesos, músculos, tendones y ligamentos. Pero además de eso, esos pasos significan salud, tanto por la ejercitación, como por la energía que el planeta nos manda del suelo.
La salud de nuestros pies, influye sobre la salud general de nuestro cuerpo (si sentimos rigidez de las articulaciones, puede significar artritis. El hormigueo o entumecimiento puede indicar diabetes. La hinchazón puede ser señal de una enfermedad renal, enfermedad cardiaca o hipertensión arterial) significa que su buena salud no solo depende de la atención a ellos, sino a otros órganos del cuerpo que a través de ellos descargan toxinas.
El cuidado y exámenes frecuentes de los pies es una parte importante de su cuidado de salud general. Si tiene problemas en los pies, asegúrese de hablar con su médico de cabecera.
Pero además de ello, sea regalón con sus pies, deles cariño: Use zapatos cómodos que le queden bien. Lávese los pies diariamente con jabón y agua tibia. Córtese las uñas rectas de un lado a otro y no demasiado cortas.
Pero además haga un pacto con ellos y úselos como conductores de salud. Los pies, además de ser la base que nos sostienen y nos desplazan con seguridad, son el punto de contacto con el planeta y de él toman energía que llevan al resto de nuestro cuerpo.
Hablaremos luego de la Reflexología, para conciliarnos con nuestras raíces.
Paz y bien con conciencia de vida.
Yerbero.hn