Es dulce y refrescante, proviene de África, de allí su derroche de color. Es vital para una sana alimentación, nos aporta una gran cantidad de agua y fibra. En este sentido, es un alimento muy saludable que deberíamos incorporar a nuestra dieta.
Además, un truco para conseguir una buena sandía es elegirla entre las que tengan más peso y que al sonarlas con los nudillos de los dedos tengan un sonido compacto, no sordo, ni hueco. Esto nos ayudará a encontrar una que sea dulce y sabrosa. La sandía es rica en nutrientes —como vitamina A, B, C y potasio— pero su verdadera fortaleza es el licopeno, el pigmento antioxidante que da a la fruta su color rojo intenso. … Asimismo, el licopeno de la sandía se absorbe fácilmente en el cuerpo. Ayuda a combatir los radicales libres que dañan las células ayudando a prevenir la aparición de enfermedades degenerativas y el envejecimiento prematuro.
La sandía aporta pocas calorías y mucha fibra. Sus beneficios y propiedades son ideales para dietas de adelgazamiento y para evitar el estreñimiento. Es preventiva contra el cáncer y disminuye el riesgo de sufrir enfermedades del corazón y arteriales. Sin grasa, con fibra y buen sabor.
La parte blanca de la sandía contiene una gran cantidad de vitaminas y minerales, es quizás la parte más importante de esta fruta, la parte verde está llena de cristales de clorofila, pigmento que ayuda a desintoxicar el organismo y a depurar la sangre. Te ayudará a aliviar inflamaciones, evitar el estrés y depurar tu sangre.
Las semillas de esta fruta tienen propiedades diuréticas y depurativas. Fibra. Las semillas de sandía son ricas en fibra, lo que favorece el tránsito intestinal y mejora las digestiones.
Coma Sandía. La parta blanca puede licuarla acompañándola de otra fruta, una a la vez: tomate, limón, fresa, mango, naranja, o bien un tubérculo, jengibre, camote, o bien zacate limón, en fin, coco, yerba buena, etc. Aumentando así sus potencias.
Recuerda, la mejor hora para consumir frutas, es antes de desayunar y una hora antes de tomar el almuerzo.
Es muy posible que no conozcas sus increíbles propiedades, o quizá no sabes que los expertos en nutrición llaman a la sandía “la fruta que es buena para todo” … aquí algunos beneficios
Para el corazón
Es una fuente natural de L-citrulina, un compuesto que influye de manera importante en la salud cardiovascular y se transforma en L-arginina, un aminoácido que ayuda a la producción de óxido nítrico, fundamental para el mantenimiento de la elasticidad de las arterias y los vasos sanguíneos
Contra el cáncer
Es un carotenoide conocido por su capacidad antioxidante. Este compuesto desempeña un papel activo en la lucha de varios tipos de cáncer como el de mama, próstata, útero y pulmón mediante la protección de las células contra el daño de radicales libres.
Presión arterial
Una dosis diaria de jugo de sandía podría ser suficiente para bajar la presión arterial. Es una fruta funcional con efectos vasodilatadores que aumenta la síntesis de óxido nítrico, con la consiguiente disminución de la presión sanguínea.
Como diurético
Si padeces problemas en riñones, vías urinarias, próstata, o retienes líquidos, la sandía es un diurético natural ideal para la eliminación de toxinas y aumentar la secreción de orina por los riñones. Su alto contenido en fibra favorece además la limpieza de los intestinos y el correcto funcionamiento del sistema digestivo. Es aconsejable para reforzar el sistema inmunológico.
Síndrome metabólico
Beber jugo de sandía molido junto con su corteza o cáscara puede reducir el riesgo de síndrome metabólico al mejorar los niveles de azúcar en la sangre y la disfunción de las grasas asociadas con la obesidad y la diabetes tipo 2.
Para los ojos
Es una maravillosa fuente de beta caroteno el cual se convierte en el organismo en vitamina A. Esta vitamina ayuda a producir los pigmentos en la retina del ojo y protege contra la degeneración macular relacionada con la edad. Tres porciones al día podrían disminuir el riesgo de padecer esta enfermedad.
Vida sexual
Gracias a su compuesto de L-citrulina promueve la correcta circulación de la sangre en todas las partes del cuerpo. Relaja los vasos sanguíneos y es ideal para la disfunción eréctil.
Piel radiante
Su alto contenido de licopeno, vitamina A y C la convierten en una fruta que puede hacer maravillas. Además, gracias al poder antioxidante del licopeno y dado que la mayor parte del contenido de la sandía es esencialmente agua y fibra es una excelente protección contra los rayos UV.
Para el calor
Haz 8 vasos de una bebida refrescante de sandía con menta y limón:
2 lts. de agua
4 tazas de sandía
Miel o azúcar
8 rebanadas de limón
24 hojas de menta o hierbabuena
Licuar la sandía con ½ taza agua hasta lograr un puré suave, agrega la miel (poca porque la fruta ya es dulce) y licúa con el resto del agua. Coloca una rebanada de limón junto con 3 hojas de menta en el fondo del vaso y machaca, agrega hielo y vierte el agua de sandía. Mezcla antes de beber.
Recomendamos elegir sandías ecológicas con semillas. ¡Buen provecho!
Paz y bien y pásala bien.
El Yerbero.hn